La imagen lo dice todo. Ante nuestros ojos, la carretera de Catabois se transforma en un acceso moderno y digno de una ciudad con historia y futuro. La entrada a Ferrol, que durante años parecía anclada en el abandono, ahora brilla con una infraestructura renovada, ordenada y pensada para el ciudadano. Asfalto impecable, señalización clara y una armonía urbana que invita a entrar con orgullo en la ciudad.
Este es el resultado de una gestión eficiente, de un liderazgo que apuesta por el progreso, encabezado por José Manuel Rey Varela. En contraste, la etapa anterior, bajo el gobierno de Ángel Mato, dejó una sensación de estancamiento, con infraestructuras que clamaban por atención y proyectos que nunca se materializaban. Ahora, la diferencia es visible, tangible y, sobre todo, disfrutada por quienes transitan diariamente este renovado acceso a Ferrol.
Cada detalle de la fotografía refleja el cambio: una vía más segura, más ágil, con una estética cuidada que da la bienvenida como Ferrol se merece. La transformación de esta entrada no es solo una mejora vial, sino un símbolo del nuevo rumbo de la ciudad.
En el pasado, esta vía representaba un problema constante para los conductores. Baches, parches de asfalto mal colocados y una señalización deficiente generaban incomodidad y riesgos en la circulación. Hoy, gracias a una planificación responsable y al compromiso con la mejora de Ferrol, la diferencia es abismal.
Los conductores que llegan desde Narón o desde la AP-9 encuentran ahora un acceso fluido, En lugar del caos de otros tiempos, donde la falta de mantenimiento generaba atascos y situaciones peligrosas, ahora se respira un orden que da tranquilidad a quienes entran en la ciudad.
Bajo el mandato de Ángel Mato, muchas promesas quedaron en palabras y no en hechos. La ciudad vio cómo pasaban los años sin grandes avances en sus accesos ni en sus infraestructuras más esenciales. La entrada por Catabois era un reflejo de esa falta de acción, un punto clave de la ciudad que seguía sin recibir la atención que necesitaba.
Ahora, con José Manuel Rey Varela al frente, Ferrol vuelve a mirar al futuro con esperanza. La mejora de la entrada desde Catabois no es un hecho aislado, sino parte de un modelo de gestión que apuesta por la transformación real de la ciudad. Se demuestra que, con voluntad política y buena administración, es posible cambiar la cara de Ferrol y devolverle el esplendor que merece.
Los vecinos ya han notado el cambio. Los comerciantes de la zona celebran una mejora que no solo facilita el acceso a sus negocios, sino que también embellece el entorno y lo hace más atractivo para los clientes.
Este es el Ferrol que muchos esperaban. Un Ferrol que progresa, que deja atrás el abandono y que avanza con paso firme hacia un futuro más prometedor. Porque las ciudades no avanzan con excusas, sino con hechos. Y esta transformación en la entrada de Ferrol es la prueba irrefutable de que, cuando hay gestión, hay resultados.
